Como si fuera un duelo de aquellos de los viejos tiempos, los dos mejores ajedrecistas cubanos de este siglo, Leinier Domínguez y Lázaro Bruzón se enfrentaron en la final de la primera Copa cubana de ajedrez online, sellado con triunfo del primero 3,5-2,5.
Se jugó a través de la plataforma Lichess, pero fue como revivir los enfrentamientos inolvidables de los dos Grandes Maestros, ahora emigrados, quienes chocaron este domingo en la fase conclusiva, algo esperado de antemano.
Como muchos esperaban, hubo emoción y épica en la serie de combates de distinta duración, y hubo que esperar hasta el último momento para conocer al triunfador: la sexta partida.
“Terminó la Copa online con el match final que jugué hoy contra Leinier. El se impuso por marcador de 3 y medio a 2 y medio. Creo que fue un encuentro interesante, con partidas difíciles para ambos”, escribió Bruzón en su cuenta de Facebook.
El choque de titanes empezó muy igualado, con dos igualdades en las partidas a cinco minutos, pero la balanza se desniveló en el blitz a tres minutos, que arrancó de la misma manera: con la igualdad. En la cuarta batalla, Lenier aprovechó las blancas y le infringió una derrota muy costosa a Bruzón.
Cuando parecía que la suerte estaba echada, el ajedrecista contra las cuerdas se recuperó y devolvió el golpe en el primero de los combates bullet (a dos minutos). Pero Leinier dio la estocada final en el segundo, aprovechando las piezas blancas, al llegar a un final de torre con peón de ventaja.
El match cayó del lado de Leinier, el primer campeón de la Copa cubana de ajedrez online, deporte que ha aprovechado las facilidades que da internet para sobrevivir al coronavirus.
“Siempre es bueno recordar esos encuentros que marcaron una época en nuestro Ajedrez. En mi opinión, muchos disfrutaron no solo de la final, sino de todos los encuentros previos. Quiero aprovechar para darle mis más sinceras felicitaciones y agradecer a los que hicieron posible esta iniciativa, especialmente a nuestro querido amigo Roberto Pantoja”, añadió Bruzón.
Ambos grandes maestros, como otros destacados ajedrecistas cubanos, emigraron. Bruzón siempre se mantiene muy activo en redes sociales y opina sobre la realidad cubana, pese a su ruptura con la Federación de la Isla. Ahora, aprovechó para mandar un mensaje de esperanza.
“Este tipo de eventos valen la pena y marcan pautas para que en un futuro podamos ver un torneo así en Cuba, donde puedan participar todos los cubanos, vivan donde vivan, sin distinción ninguna. Gens una sumus (Somos una familia)”, dijo.
Este llamado suyo no es nuevo. Semanas atrás, pidió respeto para quienes luchan por sus derechos de forma cívica, al tiempo que deseó que en Cuba «cada cual pueda expresarse y decir lo que siente y piensa sin temor a las consecuencias».
“Te vi rapido asere y más allá del resultado, fue bueno poder disfrutar de ese torneo que queda para la historia”, dijo en los comentarios uno de los participantes, el Gran Maestro (GM) Juan Carlos Obregón.
Esta ocasión permitió reunir, al menos vía internet, a lo mejor de los trebejistas cubanos, muchos con carreras fructíferas en el extranjero, como el caso de Leinier o Neuris Delgado, asentado en Paraguay desde hace muchos años.
Desde ya, muchos aficionados sueñan con una nueva edición de este choque de titanes. Otros esperan que, algún día, quién sabe si pudiera jugarse en vivo y en la Isla que a todos los vio nacer.
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