La NBA fue testigo de un renacimiento de las dinastías, tras una temporada 2017-2018 marcada por el tercer título en los últimos cuatro años de los Golden State Warriors. Las mismas parecían condenadas a la extinción debido al tope salarial que busca nivelar el accionar económico de las 30 franquicias actuales.

Para la presente temporada, muchos podrían pensar que los Warriors, con una escuadra aún más potente, pasearán la distancia en busca de otro título. Sin embargo, otras franquicias construyen proyectos ilusionantes que llevan a pensar que la tropa de Steve Kerr tendrá oposición seria en las siguientes temporadas.

Les presento 6 equipos favoritos para la campaña, así como una breve radiografía de sus fortalezas y debilidades.

Golden State Warriors

Con tres coronas en cuatro años, la franquicia californiana no se detiene y añadió más poder a su ya temible quinteto regular. Con el fichaje de DeMarcus Cousins, para muchos el mejor pívot de la liga, Steve Kerr tendrá a su disposición algo nunca visto: una alineación titular en la cual todos sus efectivos exhiben el estatus de All Stars.

Kerr no podrá contar con Cousins hasta mitad de temporada, sin embargo, esto no debería ser preocupante cuando se cuenta con hombres como Stephen Curry, Klay Thompson, Kevin Durant o Draymond Green.

Solo una actuación perfecta de algunos de sus rivales en los Play Off, podría acabar con las aspiraciones de un cuarto título en cinco años para Golden State. La superioridad sobre el resto es más que evidente.

Boston Celtics

Quizás muchos se sorprendan de mi elección de los Celtics como segundo favorito. Sin embargo, el proyecto de Brad Stevens es cada vez más realidad y cada vez menos utopía.

A figuras establecidas como Kyrie Irving, Gordon Hayward y el dominicano Al Horford, se le sumaron jóvenes promesas como Jaylen Brown y Jayson Tatum vía Draft, lo que augura un futuro brillante, pero resta mucho trabajo por hacer.

En primer lugar, resta esperar que Irving y Hayward se incorporen libres de lesiones, las cuales mermaron las posibilidades de Boston el año pasado y segundo, que Brown y Tatum no se estanquen en su desarrollo. El año pasado ya enseñaron las garras al llegar a las finales de conferencia, y este año podrían dar la campanada.

Toronto Raptors

El traspaso de Demar DeRozan a los San Antonio Spurs permitió a la franquicia canadiense hacerse con Kawhi Leonard, uno de los más jugadores completos del momento, quien llega a ser el líder de un vestuario donde resaltan figuras como Kyle Lowrie o el lituano Jonas Valanciunas.

El reto parece grande, porque en el último lustro han visto como decepcionantes actuaciones en la postemporada han echado por tierra excelentes temporadas regulares. No obstante, ya no tendrán que enfrentarse a su bestia negra, Lebron James, quien se mudó al lejano oeste.

Un problema podría ser el cambio de entrenador principal, pues ni siquiera un premio al entrenador del año pudo salvarle el puesto a Dwane Casey. Nick Nurse, quien en los últimos años fungió como asistente de Casey, tomará el cargo, por lo cual no se esperan grandes cambios desde un punto de vista táctico.

Houston Rockets

Esta franquicia va por más tras la gran actuación en la temporada anterior, pero deberán vencer los fantasmas del pasado. La temporada anterior mostró que un Chris Paul magistral y un James Harden en modo MVP, no son suficientes para ganar un anillo cuando enfrentas fuerzas tan poderosas en tu propia conferencia. Esto lo sabe el entrenador Mike D´Antoni, pero quizás no lo comprende tan bien la gerencia general, que apuesta por un Carmelo Anthony de 33 años, quien siente el rigor de jugar en el más alto nivel por 16 años. Sus números el año pasado con Oklahoma City no estuvieron a la altura de las expectativas, y no parece posible un renacimiento de su juego.

Los Ángeles Lakers

Lebron James es sinónimo de calidad y éxito, y eso lo saben en Los Ángeles. Los Lakers apuestan por un hombre de 33 años quien se ríe del paso del tiempo. Su sola presencia asegura un lugar en los Play Off, estancia a la que no llegan los laguneros desde 2011. Pero con la presencia de los Warriors y los Rockets en el oeste, el King James necesitará apoyo.

La pregunta es quién se lo dará. La primera apuesta, vía traspaso, ha sido Rajon Rondo, un base establecido, con experiencia y que sabe manejar los tiempos de juego como ningún otro en la liga. No obstante, sus problemas de disciplina pueden ser un obstáculo y, además, no aporta mucho en la anotación.

Otro refuerzo de lujo es necesario para aspirar a grandes cosas. Hasta ahora, apuestan por dos talentosos jóvenes de la casa como Brandon Ingram y Lonzo Ball, pero veremos si es suficiente.

Philadelphia 76ers

Los Sixers trabajan pensando en el futuro. El Draft de 2016 trajo a tres prometedores jugadores extranjeros que constituyen hoy la base del proyecto. El neozelandés Ben Simmons, el croata Darjo Saric y el camerunés Joel Embid, parecen ser la gran esperanza.

Los dos primeros años de Saric y de Embid sobre todo, han sido de lo mejor en cuanto a Rising Star (Jugadores de primer y segundo año) se refiere. Simmons, privado de debutar en la temporada 2016-2017 debido a lesiones, regresó por sus fueros la pasada temporada y estampó números valedores de un premio al Novato del Año. La próxima temporada parece muy pronto para asaltar el título de liga, pero está claro que los 76ers llegaron para quedarse un buen tiempo en la élite.

Comienza la temporada del mejor baloncesto del mundo y el espectáculo está garantizado.