El Tigre Riscart volverá al Villa Clara de béisbol, procedente de Italia, donde reside por temporadas. Allá, el otrora estelar lanzador villaclareño y ex coach de pitcheo del Matanzas de Víctor Mesa, intercambia experiencias, mayormente en el área del softball. Pero antes de viajar a Europa, José Ramón Riscart había hecho un compromiso de palabra, con el recién designado mentor de los Naranjas, Eduardo Paret. Le acompañaría en la cruda tarea de debutar como técnico en Series Nacionales.

Paret lo había mencionado antes como un posible “fichaje”. Ahora el Tigre, de 56 años, lo reafirma. “Paret es mi hermano y lo tengo que ayudar. Para mí es un gran orgullo estar en la dirección del Villa Clara, junto al que es para mí, el mejor pelotero del mundo. No lo haré quedar mal, él se merece lo mejor. Paret es un atleta que se da a querer por sus compañeros, y por su pueblo. Espero que el equipo tenga bajo su mando las glorias que se esperan”, escribe vía Facebook, desde Pisa.

Riscart no ha estado alejado de las funciones de entrenador, pese a que, desde su salida de los Cocodrilos, no ha vuelto a trabajar con lanzadores en Cuba en la alta competencia. De vez en cuando acudía a la Academia y compartía criterios. “El año pasado estuve trabajando con la Federación Española de Béisbol, de entrenador en su equipo nacional. Fue una temporada de aprendizaje”, cuenta.

José Ramón Riscart, durante su etapa como lanzador de los equipos Villa Clara. FOTO: Tomada de EcuRed.

– ¿La dupla Paret-Riscart, podrá estabilizar en la postemporada al Villa Clara?

“Es un trabajo de todos, si veo más apoyo, lo creo. En el área del pitcheo, por ejemplo, hay buenas figuras, lo que hace falta es disciplina. Ahí conversaré con todos, y el primero será Freddy Asiel. Hace falta un líder, esperemos sea él”.

También, porque el as de Sierra Morena, tuvo en la 57 Serie una campaña de olvido, donde en 10 salidas apenas aportó dos victorias al equipo. No obstante, fue solicitado como refuerzo, por uno que lo conoce bien: el Mesa 32. Pero en Industriales tampoco consiguió Freddy Asiel una victoria más, ni en la segunda fase, en seis juegos iniciados, ni en la postemporada en tres salidas. Por todo ello, Riscart, ve en el corralillense, la llave para el cambio de imagen de estos anaranjados.

“Los lanzadores en Villa Clara están un poco acomodados, tiran hasta el sexto inning, eso hay que cambiarlo y hacer más por la victoria. En esta Serie van a tener que lanzar cada cinco días. No se puede seguir descansando seis o siete días, hay que clasificar en 45 juegos, deben lanzar más seguido. Mejorar el control, y algunos como Yosver Zulueta y Javier Miraba, mejorar el movimiento.

“En Matanzas han tenido varios líderes, y al final, por lo visto, cualquiera puede ser ese líder, mientras tenga deseos de jugar. Eso es lo que hace falta en la pelota cubana”.

Riscart terminó su vida activa en la pelota villaclareña en el año 2000, con un PCL histórico de 3,35 y más de 150 victorias colgaron de su brazo. Reapareció en el béisbol cubano, de la mano de Mesa, con quien compartió equipo en aquel legendario Villa Clara, que ganó tres campeonatos consecutivos. Ahora regresa nuevamente, al costado de otro ex compañero de equipo: Paret.