Quizás, la renuncia de Dereck Jeter nos dejó entrever hacia dónde iba el futuro de la franquicia. O, quizás, hasta podemos caracterizar de buena la temporada que van teniendo los Marlins. Todo en el béisbol es relativo y cada situación puede variar dependiendo del punto de vista que usemos.

Ahora, mientras el sol quema fuerte y el clima de julio se apodera de Miami, los aficionados de los Peces no pueden estar contentos. No cuando ven a su equipo alejarse de la tierra prometida otro año. Si excluyéramos aquella campaña del 2020, en la que se jugaron 60 partidos y el conjunto de Don Mattingly clasificó a unos playoffs ampliados, estaríamos hablando de casi dos décadas sin disputar un juego de postemporada.

Los resultados no han mejorado mucho desde entonces, terminaron en la cuarta posición del Este el año pasado con balance de (67-95) y en esta, mantienen el mismo lugar, a seis choques por debajo de .500 (34-40). Al amanecer de ayer estaban a siete juegos del último cupo del wild card. ¿Qué está sucediendo con los Marlins? ¿Cuáles son sus principales problemas?

Lo primero es la razón por la que Jeter dejó la organización. “La visión para el futuro de la franquicia es diferente a la que me inscribí para liderar”, dijo la leyenda de los Yankees a finales de febrero en su carta de despedida. Unos párrafos antes de esa frase, mencionó que se unió al equipo con “una visión para cambiar la franquicia, y como CEO, me enorgullece poner mi nombre y reputación en juego para hacer realidad nuestro plan”.

En resumen: la visión de la franquicia nunca cumplió con la palabra que le dieron a Jeter y este, quien es un ganador nato, no quería seguir en un proyecto que no tenía el objetivo de llegar a los más alto.

Derek hizo cosas positivas, entre la más importantes, estuvo mejorar el sistema de granja que, para muchos, es uno de los más fuertes del negocio. Hace pocas horas los Marlins despidieron a Gary Denbo, el vicepresidente de desarrollo y exploración que trabajó muy cerca del hombre que arribó a Cooperstown de manera unánime. Denbo, también tuvo mucho que ver con el desarrollo de talento.

Pero, en estos tiempos, se necesita más que un buen Farm System para competir: también hay que ser inteligente a la hora de canjear y de firmar jugadores en el mercado. En otras palabras, algunas contrataciones en la agencia libre pueden respaldar al talento joven de la organización para ir al siguiente nivel.

En el tiempo en que Derek estuvo en la organización, Miami ocupó los puestos 23 (2018), 29 (2019), 27 (2020) y (28) 2021 en payroll del róster activo en los Opening Day. Tuvieron que pasar cuatro temporadas muertas para que Jeter viera que el conjunto del cual era un inversionista minoritario le daba $20 M a un jugador en la agencia libre. Estoy hablando del contrato de Avisaíl García por cuatro temporadas y 53 millones de dólares.

Entonces, sin un verdadero respaldo económico y sin mucho interés por gastar, al eterno número 2 de los Mulos del Bronx solo tuvo una opción: bajarse del barco. Lo más triste de todo es que la versión de Miami en este 2022 no es tan mala, incluso, no ganaban 34 choques en los primeros 74 encuentros de una contienda desde el 2017, pero, será difícil que puedan estar entre los seis mejores de su liga.

Si usted le pregunta a un seguidor de los Peces qué haría en esta campaña, la respuesta sería inmediata: ser compradores ante de la fecha límite de cambio (2/8) para seguir compitiendo. Ahora, si usted piensa fríamente las cosas, quizás, puedas comprar en las venideras semanas con el objetivo de mejorar en un futuro cercano, al mismo tiempo, puedes vender para llevar otros talentos a la granja.

Ellos están en una división salvaje, en la cual Mets están apostando todo para llegar a un Clásico de Otoño, pero los Bravos son los actuales campeones y tiene uno de los conjuntos más completos del béisbol. Por último, tienen a uno Filis que a pesar de las adversidades y los obstáculos que se han encontrado por el camino, no se rendirán hasta el final. ¿Vale la pena comprar para competir este año?

Para que los Marlins se conviertan en verdaderos compradores deberían tener un gran mes de julio, en el que van a jugar 20 partidos contra conjuntos que en estos momentos juegan por debajo de .500. Aun así, su destino no dependería solo de ellos, pues equipos como los Gigantes, los Cardenales más los mencionados Bravos y Filis, deberían ceder para que el plantel de Don navegue en aguas transparentes. Será difícil, aunque no imposible.

La franquicia de Loan Deport no está en buena posición ahora, porque tuvo un nefasto mes de mayo y en ese lapso, cosecharon una forja de 7-19. Ningún equipo esta temporada ha perdido más juegos por una carrera que los Marlins: en esos choques dejan un balance de 11-19 y 10 derrotas de esas, las obtuvieron en mayo. Si tan solo hubiesen ganado seis juegos de esos 19 estaría a un partido del Comodín.

Hay varias razones por las que han llegado a eso, entre ellas, el bullpen. Los relevistas de los Marlins antes de la jornada de ayer tenían la decimosegunda efectividad más alta del Big Show, también, ocupaban el puesto 21 en WHIP, 26 en hits por cada nueve inning y 15 en K/9. Esta línea la debería mejorar si quieren competir.

Otro aspecto es la ofensiva, a pesar de que contrataron a Jorge Soler y Avisaíl, los resultados no han cambiado mucho con respecto a los últimos años.  En la siguiente tabla veremos cómo se califican los bateadores en esta campaña:

Bateo Marlins
Bateo Marlins

Si bien, colectivamente se están comportando mejor que en la temporada pasada, aún, no es suficiente para guiar al equipo. Si nos fijamos en las 10 mejores ofensivas según OPS este año, tres son del Este del Viejo circuito:

Bravos .753 (4ta)

Filis .726 (9na), empatada con los Rockies

Mets: .725 (10ma)

A pesar de que la defensa ha estado bien, una de las prioridades de los Peces es adquirir a un center-field. En dicha posición se encuentran como el tercer peor conjunto en fWAR de todas Las Mayores con (0.0). ¿Qué tal si presionan a los Orioles para adquirir a Cedric Mullins? Tienen otras opciones como Michael Taylor, Myles Straw (si Guardianes son vendedores) y Ramón Laureano.

La rotación ha sido lo mejor hasta ahora. El dúo de Sandy Alcántara y Pablo López es uno de los mejores del negocio y como tercera opción, a pesar de que no ha tenido una buena primera parte, está Trevor Rogers. Jesús Luzardo y Edward Cabrera parecen buenas piezas para cerrar el quinteto titular, pero, recordemos que hay varios prospectos destacados que pronto llegarán al show: ¡Hola Max Meyer! De igual manera, si Sixto Sánchez está bien de salud sería un gran brazo para el staff. Por lo pronto, canjear a Elieser Hernández, Daniel Castaño y Braxton Garret no sería descabellado.

Mientras que los aficionados acuden más al estadio que colinda con la “Pequeña Habana”, aunque no por mucho (la media ha subido de 5620 por juegos a 6867), la esperanza de ver a los Peces compitiendo no está lejos. Pero, como dijo la presidente de operaciones, Kim Ng, “para eso necesitaremos un gran respaldo del dueño y cuando estemos en una buena posición, lo tendremos”. El reloj camina para los campeones del mundo en 1997 y 2003: el tiempo ha llegado.

Mantente actualizado con Telegram y disfruta nuestras historias en YouTube

¿Quieres estar siempre al tanto de la actualidad del deporte cubano? Únete a nuestro canal de Telegram: ¡lleva a Play Off en tu bolsillo! Haz click para seguirnos: Canal de Telegram Play-Off Magazine.

Historias de deporte cubano contadas con una mirada profunda a la vida personal de los protagonistas y la sociedad, Para disfrutar nuestras exclusivas suscríbete en: Canal de YouTube Play Off-Magazine.

Imágenes cortesía de Marlins y Baseball Reference