Frank Sánchez no olvidará la forma en la que emigró de Cuba, arriesgando su vida en una lancha, para ir tras el sueño de ser campeón mundial profesional, pues esos son momentos que marcan la vida para siempre.

The Cuban Flash, uno de los mejores boxeadores cubanos libra por libra de la actualidad, tiene un enfrentamiento definitorio contra un peligroso rival invicto que pondrá a prueba su nivel, como parte de la promocionada cartelera que encabezan Oleksandr Usyk y Tyson Fury.

Una victoria pondría al ganador en buena posición para convertirse en retador de la categoría por el Consejo Mundial de Boxeo (CMB), pues la pelea está considerada como una eliminatoria.

Han pasado muchos años ya desde que un joven Frank Sánchez, por entonces estrella emergente del pugilismo de la isla, tomó la decisión de dejar su país con algunos sueños incumplidos, como nos contó en una entrevista.

“Le gané a Erislandy en el Playa Girón del 2015, en la final. Ahí se decidía quiénes iban a los Juegos Olímpicos de Río 2016. Incluso, hicimos hasta otra pelea de eliminación en la Finca [Escuela Nacional de Boxeo Orbeín Quesada, en las afueras de La Habana] y le volví a ganar. Ya era merecedor de ese puesto”, contó.

“Aunque yo gané, lo llevaron a él a los Juegos Olímpicos. Decían que era quien tenía el ciclo olímpico. Me decepcioné, tanto luchar para eso. Es verídico que, si le ganas al campeón, te tienen que llevar a ti. Cuando aquello ocurrió, tenía 23 o 24 años y fue cuando me decidí. Para la otra edición, tenía que esperar cuatro años más y pensé que era mejor irme a pelear como profesional. Ahí fue cuando salí de Cuba”, dice.

Aquella no sería una travesía sencilla al salir de Cuba, pero el boxeador Frank Sánchez estaba dispuesto a afrontarlo todo para cumplir con sus sueños.

Frank Sánchez, el púgil que venció al mar: “voy a ser el primer campeón cubano peso pesado”

“Salí de Cuba en una lancha para México y de ahí, crucé para Estados Unidos. Es algo que no le deseo a nadie, pero cuando te sientes encerrado en un lugar en el que no tienes escapatoria, y esa es la única salida, tienes que hacerlo.

“Soy bien guapo para el boxeo, pero no para tirarme al mar. Era la única vía. Lo hice por mi bienestar y el de mi familia. Logré muchas cosas en Cuba, como ser el campeón nacional, aunque no cumplí el sueño de cualquier boxeador amateur, que es ser campeón olímpico”, explicó.

En la actualidad, The Cuban Flash está ante las puertas de un duelo definitorio, pues el triunfador este 18 de mayo en el Kingdom Arena en Riad, Arabia Saudita, se “convertirá en un retador obligatorio para quien prevalezca en el evento principal del campeonato indiscutido de peso pesado”.

Frank es el peleador de la isla mejor ubicado en el ranking entre los peso pesados, una interesante división con grandes estrellas. En esto momento, según las últimas actualizaciones de los listados mundial, aparece entre los seis primeros en los 4 grandes organismos.

Su gran aspiración sigue siendo la de alcanzar una corona mundial en su división, en la cual Cuba no ha tenido ningún campeón profesional.

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