El regreso de Alexei Ramírez a la Serie Nacional de Béisbol ha causado un impacto inmediato en Pinar del Río y buena parte de la afición del béisbol cubano, no solo desde lo estadístico, sino también desde lo emotivo para un campeonato que necesita de ídolos para despertar interés y atraer a los estadios.

Mucho se cuestionó el retorno de un pelotero con más de 42 años, inactivo desde hace un tiempo, pero desde su debut en este campeonato ha sido uno de los jugadores que más ha rendido en los Vegueros y en todo el certamen.

El ex Grandes Ligas que tanto brilló en su paso por el mejor béisbol del mundo no acusa el paso del tiempo y se ha entregado como si no hubiera mañana para el equipo con el cual alcanzó el estrellato en las Series Nacionales.

Pinar del Río es uno de los invictos del campeonato y el aporte de El Pirineo ha sido una pieza fundamental para este rendimiento de los más occidentales.

Alexei lleva 7 hits en 12 turnos al bate, de los cuales, cuatro son extrabases, repartidos en un jonrón y tres dobletes. Hasta el momento, es el líder en inatrapables de su conjunto y en empujadas, igualado con Yasser Julio González.

En el torneo, en general, El Pirineo está entre los 10 primeros en hits, average, dobles, empujadas, OBP, Slugguing y OPS, una muestra de rendimiento inmediato en la Serie Nacional 63.

Pero, más allá de las cifras insuperables, recibirá el reconocimiento en cuanto estadio se presente, como ya ocurrió en el Latinoamericano.

Sin importar cómo termine esta edición del campeonato, se postula desde ya a Alexei Ramírez como un regreso que dejará marca en la pelota cubana.

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