Croacia derrotó justamente a Inglaterra (2-1) en tiempo extra y de esta forma se clasificó por primera vez en su historia para una final del Campeonato Mundial de Fútbol. Allí enfrentará a Francia, conjunto que ya les frenó en las semifinales de 1998, cuando los galos obtuvieron su primera y única estrellita.

Al dar el árbitro turco Cakir el silbatazo final, los croatas habían jugado 90 minutos más que cualquier otro equipo y vencido en dos tandas de penales. Pero la selección balcánica ha demostrado que con ellos hay que contar hasta último momento y esta puede ser la hora de una generación que viene tocando las puertas de la gloria desde hace diez años sin resultados.

En la victoria croata fue esencial la perseverancia y el mejor aprovechamiento de las oportunidades concedidas por Inglaterra. A partir del segundo tiempo los eslavos se volcaron encima de la joven selección inglesa, haciendo uso de la excelente calidad de sus jugadores, superiores en el papel a los dirigidos por Gareth Southgate. Aunque el que persevera no siempre triunfa, esto le funcionó a los de los Balcanes.

Modric ha sido la mente de Croacia sobre la cancha y el mejor aliado de su Director, Slatko Dalic. FOTO: FIFA / Getty Images.

Y no se puede hablar de la primera clave sin ir directamente a la segunda: el fondo físico de los dirigidos por Slatko Dalic. Luego de dos tandas de penales ganadas, se suponía que iban a llegar muy agotados ante una Inglaterra que se impuso con facilidad a Suecia y venía más descansada. Pero hay que salir a jugar, y los croatas han demostrado estar en una óptima forma para enfrentarse a estos esfuerzos titánicos.

El mediocampo croata fue fundamental también en esta victoria, pues Modric, Rakitic y compañía lograron ahogar el juego inglés y desdibujarlo totalmente, para dominar a los británicos a partir de la segunda mitad del partido, a pesar de los flashazos que pudieron tener tras la entrada de Marcus Rashford.

La defensa de los ganadores también merece una mención, en las figuras de Lovren, Vida, Strinic y Vrsaljko, este último clave evitando el gol que hubiera sido la ventaja de Inglaterra cuando agonizaba el primer tiempo extra.

Mario Mandzukic e Ivan Perisic estuvieron todo el tiempo batallando buscando esos goles que catapultaran a Croacia a la que ya es su mejor actuación histórica. El delantero de la Juventus anotó el de la ventaja cuando ya parecía que no tenía una sola gota de fuerza para continuar jugando y lo de Perisic fue fundamental para encender la chispa y dar el tironazo anímico que no dejó decaer sus compañeros.

Quizás tuvieron algo de ayuda de parte del planteamiento inglés en la mediacancha, que cedió en recuperación y no encontró alternativas a las piernas cansadas y la alta presión de sus rivales. OJO: ¿Kane no debió salir antes? ¿No había nadie más para ayudar a Henderson?  Habrá que repensar planteamientos para el técnico inglés de cara a un duelo por el tercer lugar, un choque donde no tienen nada que perder frente a una Bélgica que estará más presionada por obtener bronce.

Mario Mandzukic festeja el segundo gol croata ante Inglaterra. FOTO: FIFA / Getty Images.

El duelo finalista está entonces planteado: Francia, favorito pre-competencia, se medirá a Croacia, que solo ha perdido un juego de eliminación directa en Mundiales y fue precisamente frente a la nación gala por 2-1 en las semifinales del ´98, como señalábamos al inicio.

Mandzukic se pone, tras su gol, a uno de empatar a Davor Zucker como el croata que ha participado en más goles para su selección, con 5 oportunidades contra 6 del ariete que lideró a su país hace veinte años.

Para Inglaterra, las palmas. Esta joven generación ha dado una buena impresión y llegó más lejos de lo que cualquiera hubiera soñado. Tienen mucho que arreglar todavía e imaginamos que la próxima Eurocopa deberá ser el torneo ideal para dar un salto definitivo. Aunque, repetimos, esta actuación es más que meritoria.

Si por historia se habla, la final debió ser entre Francia e Inglaterra. Pero me quedan las ganas de querer haber visto un juego entre Bélgica y Croacia el domingo a las once de la mañana.