El pelotero cubano Randy Arozarena quedó en libertad en México este jueves, en donde se encontraba detenido por el conflicto que involucró a su hija y su expareja, tras haber intentado llevarse a la menor por la fuerza.

“Fuentes del Poder Judicial y de la Fiscalía General del Estado de Yucatán informaron a ESPN Digital que el jonronero caribeño quedó libre de todo cargo al concretar el acuerdo con su expareja, quien determinó no ejercer la acción penal en contra del beisbolista”, explica el portal.

El pelotero más destacado en la postemporada de la recién concluida campaña de Grandes Ligas, pasadas las 48 horas que estipula la ley, fue trasladado este miércoles en la noche a un penal en Mérida y este jueves iba a ser imputado por violencia familiar y lesiones.

De acuerdo con el medio Yucatán Ahora, Randy llegó el lunes pasado a la casa de su expareja con el pretexto de llevarle unos regalos a la menor, fruto de un matrimonio anterior, pero “sin embargo, la sacó a la fuerza y se enfrentó a su exmujer y a su exsuegro, a quien golpeó”.

Pero según ESPN, “las autoridades decidieron que la expareja de Arozarena será sometida a exámenes psicológicos para conocer si es apta para tomar ese tipo de decisiones por la violencia que sufrió, si se determina que sí, todo quedará en el acuerdo, de lo contrario se reiniciaría el proceso en contra del cubano”.

Yucatán Ahora informa que “luego de realizarse la acusación en una audiencia que estaba programada para las 8:30 y se prolongó por unas tres horas, el juez dejó en libertad al pelotero tras desestimar la acusación”.

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Imagen cortesía de Tampa