Foto: Leonardo Morilla

La noche del 21 de febrero fue la fecha pactada para el inicio de la AmeriCup 2021 y el Coliseum de la Ciudad Deportiva vestía su traje feliz para el encuentro que media a las nóminas de Cuba e Islas Vírgenes Estadounidenses, y que terminó de forma triste para los cubanos, con derrota de 80-64 .

En un Coliseum que tuvo una discreta asistencia a pesar de que fue creciendo conforme transcurría el juego, escondido entre los aficionados y casi de incógnito, las cámaras captaron a Reynaldo García que observaba el juego desde la segunda planta del aforo.

Los muchachos de la mayor de las Antillas saltaban a la cancha con la intención de sacar la sorpresa, pero no fue así. Islas Vírgenes mayoreó durante todo el encuentro al elenco nacional y el base Walter Hodge volvió a dejar claro por qué es la bestia negra de Cuba. Con 22 cartones anotados, atrapando 8 rebotes y repartiendo 6 asistencias, Walter llevó la voz cantante de su armada.

Para el nacido en Puerto Rico esto no es nada nuevo, según reveló el propio jugador en la conferencia de prensa con una jocosa sonrisa

“Siempre he sido el azote de Cuba y el lunes que van pá allá, los voy a castigar de nuevo.

El boricua que defiende la casaca de Islas Vírgenes también destacó la alegría profunda que siente al venir a Cuba.

“Vengo a Cuba desde el 96, venía con equipos de categorías inferiores. Siempre es un placer volver a Cuba porque me encanta y hace ya un tiempo que no venía”.

Los cubanos estuvieron de lágrimas en cuanto a su porcentaje de tiros de campo. Los tiros de campo dejaron un paupérrimo porcentaje del 31.4% y para qué hablar de los tiros de la larga distancia, pues tan solo anotaron 2 en 32 intentos. La falta de juego interior, las malas selecciones de tiro y por supuesto la puntería fueron las principales causas de la derrota criolla.

Un Jasiel Rivero agotado de su viaje no rindió como se esperaba. La estrella del elenco nacional prácticamente se bajó del avión y fue a jugar baloncesto. Supimos que durante el partido se resintió de una lesión y se retiró cojeando al final del encuentro.

Por otra parte, en la conferencia de prensa posterior al partido, el escolta Karel Guzmán dió la cara ante los medios y ofreció disculpas ante la mala actuación de los cubanos.

“Nuestros porcientos de 3 puntos estuvieron pésimos. También es inconcebible que seamos locales y parezcamos visitantes. Llevamos casi dos meses entrenando juntos, yo en mi caso solo una semana y entrenemos tan poco en la Cancha en la que se va a jugar”.

Según también se declaró en la conferencia de prensa, por temas de visado la escuadra cubana tendrá algunos cambios en su nómina.

El primer round fue un duro golpe y no queda otra opción que levantarse. El avance que ha tenido nuestro baloncesto no se vio reflejado en cancha. La necesidad urgente de un base de calidad y que jugadores como Lisván Valdés junto a Marvin Cairo asuman más protagonismo, son factores claves para el futuro a corto plazo. ¿Podrá Cuba desquitarse en Saints John? Eso queda por verse.

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