Pase lo que pase, Cuba tendrá al menos un representante en la Serie de Campeonato de la Liga Americana, porque en los duelos de la Serie Divisional, de Yankees contra Tampa, hay varios antillanos, que llegan con particulares situaciones personales.  

La mesa está servida para disfrutar de los Bombarderos del Bronx por un lado y los siempre luchadores Tampa Bays por el otro, y de los enfrentamientos posibles con sabor especial del lanzallamas Aroldis Chapman contra el debutante Randy Arozarena y Yandy Díaz.

Aroldis llega en una particular temporada, marcada por el coronavirus y una suspensión por una peligrosa bola pegada, pero se reivindicó ante quienes tenían dudas con un poco habitual desempeño de seis outs en el último y emocionante juego contra los Indios de Cleveland.

Habituado a lanzar solo ante tres o cuatro hombres en cada aparición en su carrera, el holguinero le ha tomado el gusto, al menos en postemporada, a las salidas prolongadas de más de seis outs y con una víctima favorita: los mismo Indios.

Se trató del tercer juego de más de seis outs en su carrera y el segundo en playoff, además del segundo también ante… Indios de Cleveland. Acostumbrado a trabajar apenas 1 inning por presentación y alrededor de 17 lanzamientos, Chapman actuó ante estos cuando militaba en los Cachorros en un juego inolvidable, más de lo habitual, con ocho outs y 42 picheos.

Quizá en postemporada en donde se le achaca no ser todo lo dominante que se espera, pero ha respondido en momentos importantes, como ese relevo mencionado para la causa de los Cachorros.

Ahora permitió solo un hit que trajo una carrera para el plato, pero eso no resta merito a que acto seguido logró un ponche y vino un doble play salvador en ese octavo episodio. Después de ese sencillo, no hubo nada más para los Indios, que vieron como en el noveno los Yankees le daban vuelta y Aroldis se anotaba el triunfo, al cerrar con tres ponches.

Con él por los Yankees y Arozarena y Díaz por el otro, Cuba se asegura presencia en la Serie de Campeonato, que pudiera verse incrementada sustancialmente, de acuerdo con el ganador entre los Astros y el que emerja entre White Sox y Oakland.

Con Tampa, Arozarena protagoniza una historia de triunfo, de esas que solo brindan el talento y la capacidad para saber aprovechar la oportunidad cuando llega. Porque eso es lo que el pinareño hizo cuando lo subieron al equipo avanzada la temporada: ganarse con su bate un puesto en la tanda.

Bateó en la regular de forma destacada, con 7 jonrones y 11 impulsadas, pero se graduó a la hora buena contra Toronto, en un puesto de responsabilidad como es el segundo madero, al irse de 8-4 entre ambos desafíos 8-4, con dos dobles, un triple y tres anotadas.

Anoche, fue especial: de 4-3, y se situó a la altura de los grandes, pues como señala el colega Francys Romero, se convirtió en el cubano número 17 en pegar tres hits en un juego de postemporada.

Mientras, reaparecía también Yandy Díaz, como cuarto madero, después de una prolongada ausencia de un mes y aunque se iba de 2-0, retomó su vieja costumbre de embasarse, con dos boletos a su cuenta y una anotada.

De esta forma ratifica su tendencia a llegar de forma habitual a las almohadillas, pues en su actuación en la regular negoció 23 boletos y logró un excelente OBP de 428.

Se avecina un enfrentamiento duro a partir del cinco de octubre, en el que los fanáticos pudieran disfrutar de estos duelos emociones entre Chapman y sus compatriotas de los Rays, en una Serie Divisional atractiva al mejor de cinco.

Por la otra llave, muchos aguardan con esperanzas que los White Sox de los cuatro cubanos venzan para que se dé un choque con los Astros de Yuli Gurriel, que sería un cara a cara entre dos peloteros que están siempre en las comparaciones de los fanáticos: el calibre MVP Pito Abrey y el más nombrado de los hermanos Gurriel.

Mantente actualizado con Telegram

¿Quieres estar siempre al tanto de la actualidad del deporte cubano? Únete a nuestro canal de Telegram: ¡lleva a Play Off en tu bolsillo! Haz click para seguirnos en: t.me/playoffmagazine

Imagen cortesía de MLB