Todos los jugadores que son firmados por las organizaciones de Grandes Ligas tienen suficiente “talento potencial” para llegar a Las Mayores. La diferencia muchas veces está en la entrega y responsabilidad con la que el jugador asume el reto. La paciencia marca pautas y algunos se cocinan a fuego lento mientras que otros saltan en la sartén como rositas de maíz bien temprano.
Hemos escrito acerca de los prospectos antillanos principales sobre los que, a priori, se establecieron mayores expectativas. Fuera de aquellos once, hoy estaremos hurgando en cinco de los cubanos en Las Menores que, sin estar ranqueados en la cima, están haciendo un trabajo exquisito en sus diferentes organizaciones y niveles de juego y merecen un seguimiento cercano.
No son todos los que hoy merecen tener el reflector sobre los hombros, reto que intentaremos superar, pero sin dudas, sí son de los que se perfilan con chances a mediano plazo.
Yusniel Díaz, a la calladita domina la clase AAA en Norfolk
Díaz fue parte del trato que llevó a los Dodgers a Manny Machado en el 2018. Entonces era el prospecto número cinco en los Dodgers y pasó en el 2019 a ser valorado como el número uno en la organización de Baltimore. Algo pasó que hizo que la relación se enfriara.
El 2021 lo vio poner números de espanto. Solo .161 de promedio ofensivo con un OPS de .498 bajaron casi a cero el nivel de expectativas con su temporada de los 25 años de edad. Hasta ahora, sin embargo, va siendo una verdadera decepción para los que apostaron en su contra.
En 42 partidos con los Norfolk Tides, equipo afiliado de AAA a los Orioles de Baltimore, Yusniel acerca su OPS a los cuatro dígitos (.968) y su relación de ponches y bases por bolas (7 y 7) recuerda su momento cumbre con los Tulsa Drillers de los Dodgers en el 2018 (39 y 41).
El 13 de abril fue puesto en la lista de lesionados y desde que regreso en mayo ha tenido solo uno de seis partidos sin hits (dos en 12 en toda la temporada) mientras se ha convertido en un hombre casi seguro en las bases para el equipo que defiende.
En la actualidad, tiene un promedio ofensivo de .333 a lo que suma dos cuadrangulares y nueve empujadas como aval ofensivo.
Lázaro Armenteros, carburando en la costa oeste
“Lazarito” está tomando el pulso y de qué forma a la Clase A Avanzada. Los “Lansing Lugnuts” de Oakland se benefician ahora mismo con su OPS de cuatro digitos, 1.007.
Para tener una idea de qué ha cambiado, en solo 45 turnos oficiales, Lázaro ha pegado en el 2022 la misma cantidad de jonrones (4) que en los 174 turnos que tomó en la misma categoría en el 2021. Otro aspecto positivo se pone de manifiesto cuando toma 4,357 picheos por turno (mayor cantidad de toda su carrera) y se poncha 20 veces con 11 boletos (menos de dos ponches por boleto cuando su media acostumbrada había sido de más de 3 cafés por pasaporte gratuito a lo largo de la carrera)
El promedio ofensivo del cubano es de .289 y aunque debe mejorar su “oportunidad” (los cuatro jonrones han sido en solitario mientras que promedia para .133 con corredores en circulación) sus casi 23 años (los cumplirá el próximo 22/05/22) le garantizan aun tiempo para el ajuste.
Bryan Ramos, otro cubano para alimentar a los CubanSoxs
Brayan ya se encuentra ranqueado como el prospecto número 10 dentro de la organización del sur de Chicago. En su tercera temporada como profesional y primera dentro de la clase A Avanzada el jugador de cuadro parece ya ir encontrando un ritmo que le permitirá desarrollarse y avanzar.
En 98 turnos al bate promedia para .327 con un OPS de .911. Sus cuatro cuadrangulares, 17 empujadas y 15 anotadas lo califican como un jugador decisivo en los Winston-Salem Dash. Su BABip de .368 se conjuga con el hecho de que en 22 oportunidades para forzar doble jugada en contra de su equipo ha logrado evitar las 22. Si no es un buen récord, seguramente se parece bastante.
Lamentablemente, mayo le ha visto caer en slump (26-3) luego de un abril terrífico para los rivales (72-28 para .403). En el mes inaugural logró una racha de 15 encuentros consecutivos bateando hits: de 17 desafíos solo en uno no conectó imparable y de ellos, en nueve encuentros logró archivar más de uno.
Las miradas estarán sobre su desenvolvimiento.
Sandro Bargallo se perfila como la nueva perla del picheo abridor
Los HammerHeads de Jupiter han puesto sus ojos en el nuevo “delfín” de la organización de los Marlins de Miami. Sandro Bargallo, lanzador zurdo de 180 libras de peso repartidas en seis pies y una pulgada, ha tenido un arranque fabuloso y en cinco salidas, todas como abridor, y ya se acerca a los 27.2 innings de labor (21.2) logrados en el 2021 y que es su tope para una temporada.
En todo ese tiempo, el natural de Contramaestre, en el oriente cubano, solo ha permitido una anotación a los rivales y lidera a todos los abridores cubanos en Las Menores en efectividad (0.42) y en general, es solo superado por el 0.00 de Yennier Cano.
Bargallo es además el que más ponches ha logrado entre los cubanos (27) y el promedio de bateo en contra parece haber contraído algún tipo de hepatitis (.167), por lo que sus cinco salidas han sido una muestra esencial para incrementar la valoración sobre el lanzador que siquiera tiene foto de perfil en la página oficial de la clase en Las Menores.
Yennier Cano, desde los Santos de San Paul hasta los Mellizos
Lo dejamos para concluir porque el suyo es un caso especial: ya está cerca de debutar y aumentar la presencia de la armada antillana en MLB. Con dos años previos de experiencia en las Menores (2019 y 2021), Cano había sido ranqueado en el puesto 38 entre los prospectos de la organización por Fangraphs. Su velocidad había estado allí, pero la madurez para mezclarla y convertir sus picheos en un arma invencible estaba por llegar.
Yennier ha lanzado en el 2022 en la clase AAA por 12 entradas sin permitir anotación limpia (una sucia). Sus 14 ponchados, el promedio de bateo de sus rivales de .158 y el Whip de 0.83 le han valido una invitación bien temprano a debutar con unos Mellizos que lideran la División Central de la Liga Nacional.
El gran momento pudo llegar este miércoles, pero fue frustrado con la lluvia, que detuvo el choque entre los Mellizos y los Astros. Con 28 años, es el ahora o nunca para el lanzador que logra tocar las 100 mph con sus bolas rápidas.
¿Evolución? El 90.9% de los corredores que ve en circulación se quedan allí para hacer el cuento (75.3% en la misma categoría en el 2021) mientras que el 75%% de las conexiones que recibe son de rolling sin permitir un jonrón (60.9% en el 2021 y el 12.1% de los fly sobrepasaron las bardas del campo).
El rollo del 2022 recién comienza y de nuestra mano seguiremos dando cobertura a las historias más interesantes de los peloteros cubanos en Las Menores.
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