En un día histórico y con beisbolistas cubanos como protagonistas, la selección de España mereció el título de campeona de Europa tras vencer a Gran Bretaña y completar un gran torneo.  

Este triunfo no solo representa la gloria para el equipo, sino también un regreso triunfal después de sesenta y ocho años desde su último título continental absoluto en 1955.  

En este torneo, España contó con cinco beisbolistas cubanos y un coach de banca de la isla, y varios de ellos fueron grandes figuras durante el desarrollo del campeonato, pues Pablo Guillén fue el abridor del juego decisivo y Omar Hernández lideró dos importantes estadísticas.  

Bajo el liderazgo de Nelson Prada, el equipo español mostró un rendimiento excepcional durante todo el torneo, pues no conoció la derrota y se consolidó como un verdadero contendiente desde el principio. 

Primero, en el Grupo A, superaron a equipos como Grecia (14-1), Austria (13-1) y República Checa (9-0) para asegurar su lugar en los playoffs. 

Los lanzadores Rogelio Armenteros, Pablo Guillén y Carlos Sierra fueron los monticulistas de la isla que representan a la nación ibérica. Junto a este trío, estuvieron presentes Omar Hernández (receptor) y Frank Hernández (jardinero), además del coach de banca Néstor Pérez Jr.   

La verdadera prueba para España llegó en las semifinales contra los Países Bajos, ante quien lograron una remontada increíble en la novena entrada.  

Ya en la final contra Gran Bretaña, los españoles dominaron el juego con una ofensiva excepcional y una defensa sólida para llevarse la victoria por 11-2. Uno de los grandes nombres fue el lanzador cubano Pablo Guillén, quien actuó por espacio de 5 innings y permitió dos carreras.  

Esta presentación del serpentinero se unió a la que realizó anteriormente, cuando concedió tan solo un hit en las cinco entradas que lanzó, con 7 ponches.  

Además, en este choque que coronó a España, Carlos Sierra actuó por dos entradas sin permitir libertades, justo como relevo de su compatriota Guillén.  

Pese a que no produjo en este juego como a lo largo del torneo, el cubano Omar Hernández fue uno de los grandes bateadores del conjunto, pues lideró el certamen en jonrones (4) y en anotadas (10).  

Hernández promedió 396 en total, con 10 remolcadas y un slugging de 964, gracias a sus 4 bambinazos. En el juego que dio el pase a las semifinales, bateó cuatro hits en cinco veces al bate, los cuales fueron todos extrabases: dos vuelacercas, más un doble y un triple.  

También España contó con el MVP del campeonato, Wander Encarnación, quien completó igualmente un certamen extraordinario (0.550 de AVG y 11 RBI).  

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Imagen cortesía de Grega Valancic