«Nací en Cuba, en la provincia Las Tunas. Tengo a toda la familia de mi madre y unos buenos amigos allá. Mis parientes son del municipio Jesús Menéndez. Voy a Cuba casi todos los años y espero regresar en diciembre. Mi padre es suizo y mi madre es cubana», cuenta Fabian Gloor, un futbolista de raíces cubanas que se desempeña en Suiza.
El talentoso defensor y lateral de 21 abriles inició en los deportes de la mano de su progenitor, quien fue delantero en el FC Adliswil. Ahora, Fabian formará parte de la convocatoria de la selección nacional cubana.
«Cuando mi papá terminó la escuela, se dedicó a viajar un poco por el mundo. Entonces, quiso ir a Cuba para conocer el país y aprender español. Allí conoció a mi mamá mientras hacían una excursión al Pico Turquino. Mi madre estudiaba medicina. Vine a vivir a Suiza cuando tenía dos años. Aquí vivimos los tres actualmente», amplía.
Un pequeño balón acompañaba a Fabian Gloor en cada rincón de la casa cuando era niño. Su padre jugó hasta los 20 años, aproximadamente. Destacó por su velocidad. Esa cualidad también la heredó su hijo, cuya calidad no pasa desapercibida.
¿Cuándo fichaste por el FC Zúrich?
Yo vivo en Adliswil, una ciudad de unos 15 mil habitantes cerca de Zúrich. Con cinco años entré al club de mi localidad. Normalmente, en Suiza se empieza con seis años, pero me pude adelantar porque un entrenador de la escuela me vio jugar junto a mi padre. A los 11 años, me fui al FC Zúrich y dejé de jugar solo por diversión.
Mi adaptación al club fluyó sin problemas. FC Zúrich tiene escuelas en varias regiones, y los jugadores entrenan una vez a la semana en la cantera central. A partir de la categoría sub-15, se concentra todo el talento en un solo lugar. Gracias a este sistema, los chicos se aproximan poco a poco y se recoge el talento de todas partes.
¿Qué ha significado para ti representar a la Züri Akademie?
Es el equipo más importante de la ciudad más grande de Suiza. Cuando vas por Zúrich, ves dibujos del FCZ por todas partes. Tenemos muchos fans, y por eso siempre ha sido un orgullo representarlos. Fui mucho al estadio a ver al equipo junto a mis padres.
Siempre fue mi sueño pertenecer a la institución. Fue muy especial cuando entrené por primera vez con el primer equipo porque conocí a jugadores que estaba adaptado a ver por televisión.
Jugadores del primer equipo que te impresionaron más…
Ninguno resaltaba por encima del otro, pero si tuviera que mencionar alguno sería al internacional suizo Blerim Džemaili por su gran carrera. Todos fueron amables conmigo en el camerino. La pasé muy bien con el español Adrián Guerrero porque le dije que sabía hablar castellano y a él le gustaba hablar su lengua materna con alguien más.
¿Cuál es el consejo más importante que te han dado en el FCZ?
No es un consejo, pero lo más importante que aprendí en el club son los valores que también nos deben acompañar en los restantes aspectos de la vida. La disciplina, el respeto, y en especial, el nunca rendirse.
Desde pequeño siempre das el máximo para mantenerte otro año. Además, siempre hay otro pujando por tu puesto. Ya en la sub-21, tienes que estar en el vestuario media hora antes del entrenamiento, y si llegas tarde, deberás pagar una multa.
Fabian Gloor, tunero de nacimiento, firmó 27 partidos ligueros con un gol, 26 titularidades y más de 2400 minutos al servicio del filial del FC Zúrich durante la pasada temporada. En el reciente mercado, el club de sus amores lo renovó hasta 2025. Sin embargo, Fabian salió cedido por una campaña al FC Baden de la Segunda División de Suiza. Al momento de la redacción de estas líneas, Gloor ha disputado varios partidos en el nivel de plata en calidad de lateral derecho.
“Mi representante, mi familia y yo decidimos que era tiempo del próximo paso. Ahora juego por primera vez fútbol profesional, en vez de fútbol juvenil. Me enfrento a muchos jugadores de experiencia. Aquí todo es más rápido y táctico. Presto más atención a la alimentación y al dormir lo suficiente. Necesito esta experiencia para seguir mi camino” acota Fabian sobre su cesión en FC Baden.
¿Quién ha sido tu referencia en tu posición en el fútbol?
Mi posición favorita siempre ha sido el lateral. Hay juegos que prefiero por la derecha y otros por izquierda. Aunque jugué mucho la defensa central en la última temporada. De niño siempre me fijé en Dani Alves, pero ahora observo más a Theo Hernández.
El entrenador que más te ha marcado…
Definitivamente, mi padre. Él me entrenó en el FC Adliswil por poco tiempo, pero aunque no sea mi entrenador oficial, siempre me dice lo que hice bien y lo que tengo que mejorar. Vamos juntos al campo y al gimnasio. Siempre me motiva cuando estoy cansado.
Háblame de tu familia en Cuba…
Tengo allá bisabuelos, abuelos, tíos y primos. Mi familia allá es mucho más grande que la de Suiza. Mi abuelo siempre se preocupa por mi carrera, al igual que unos amigos que he conocido toda mi vida. Cuando estoy en Cuba, lo mejor es jugar fútbol con amistades del barrio al caer la tarde. También me encanta estar en la playa y bañarme. Me llevo el plan de entrenamiento para mantener la forma, y trato de llevarlo a cabo aunque falten los recursos.
¿Integraste alguna vez selecciones de categorías inferiores suizas?
Estuve en la Sub 15 de Suiza, pero no pude continuar por problemas físicos. Me diagnosticaron dos años de retraso en mi edad biológica.
¿Y cómo te sientes al ser convocado por los Leones del Caribe?
Cuando estaba en Suiza Sub 15, un entrenador nos preguntó qué sueños teníamos en el fútbol. Yo contesté que quería jugar algún día en la Bundesliga y participar en una Eurocopa o un Mundial con la Selección de Suiza. Sin embargo, el desarrollo de la Selección Nacional Cubana en los últimos años me ha dado una oportunidad diferente para cumplir mi sueño.
No hay nada más grande para un deportista que representar a su país. Como sabes, yo tenía dos posibilidades y me siento tan suizo como cubano. La convocatoria de Cuba me hace sentir muy orgulloso por toda la gente del pueblo de mi familia que me sigue desde allá.
¿Qué aportará Fabian Gloor a la Selección Cubana?
Como no conozco todavía al equipo es difícil decirlo, pero creo que mi buena condición física les ayudará mucho. Además, ganan otro jugador formado en el extranjero.
La incorporación al seleccionado de las cuatro letras de una de las promesas más integrales nacidas en la Isla constituye un gran acierto para el fútbol cubano. No obstante, la calidad profesional de esta nueva adquisición, y otras en el futuro, demandará ser correspondida con igual superación por parte de los encargados de dirigir. Jugadores como Fabian, y la afición, merecen un proyecto serio.
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