En Cuba existen 11 mujeres árbitros de fútbol, una cifra ínfima comparada con la generalidad, donde abundan los hombres. Cuatro de ellas, son de Villa Clara, la provincia que más féminas tiene en este rol de impartir autoridad en una cancha. De rango internacional —categoría FIFA—, hasta diciembre de 2017, existían tres mujeres, una de ellas era Yanelys Chávez Rivero, zulueteña de nacimiento.

Pero en estos momentos Yanelys ya no ejerce tal función. Su exclusión no vino de parte del organismo rector del balompié mundial, ni de la Confederación regional (CONCACAF). El descarte llegó desde la Asociación de Fútbol de Cuba (AFC) y su vicepresidente en aquel entonces —luego se largó a otro país—, Luis Enrique Yero.

“El motivo por el que ya no soy árbitro FIFA, lo desconozco. La Asociación nacional nunca me ha dado explicaciones. Lo único que puedo decir es que Yero, ex vice-presidente, que se fue de este país, a base de anónimos enviados a la Unión de Fútbol del Caribe (CFU, por sus siglas en ingles) y CONCACAF, me injurió. Pero a mí ningún directivo del fútbol me ha hecho alguna amonestación, ni dado una explicación. Le escribí un sms, en marzo, a Luis Hernández, presidente de la Federación Cubana y, en la respuesta, intencionó que no conocía sobre mi situación”.

El país pierde una árbitro FIFA, y el presidente de la Federación no lo sabe. Típico.

“En 2017, me hicieron todas las pruebas físicas de FIFA y las aprobé todas. Fui la mejor árbitro de este país y recogí todos los reconocimientos en esa materia. Siendo internacional fui a los torneos nombrados por CFU y CONCACAF, incluido un Pre-Mundial Sub 17 en Granada, mientras Cuba me denegaba el Pre-Mundial Sub 20, que era en Honduras. Tampoco en ese momento tuve una respuesta oficial del por qué., Simplemente estas cosas suceden y ya. Sigo siendo la mejor árbitro FIFA, aunque Cuba me excluya. Aquí las cosas se manejan así”.

Chávez acaba de oficiar un partido de la hexagonal final de la Liga Cubana de Fútbol, entre los equipos de Granma y Sancti Spíritus. No la han llamado para otro choque. Pero se prepara diariamente, con una rutina de ejercicios que comienza a las cinco de la madrugada y termina casi al mediodía. El fútbol siempre ha sido el deporte que le ha gustado, aunque en la escuela de iniciación deportiva (EIDE) Héctor Ruiz de Santa Clara lo que practicó fue atletismo, hasta que en Cuba se le puso algo más de interés al fútbol femenino, después del 2002. Entonces se hizo atleta, hasta que sufrió una lesión muy grave en una pierna y tuvieron que operarla de urgencia en Jiguaní, Granma.  Con la lesión llegaron las limitantes dentro de la selección nacional, y en 2010 pasó al arbitraje por decisión personal.

Yanelys (fungiendo como árbitro principal), justo antes de comenzar un partido pre-mundial en Concacaf. FOTO: Cortesía de la entrevistada.

“Hubo un tiempo que no paré, de la clasificación sub 17, pasé a la Sub 20, y de ahí a la clasificación olímpica. Al mes volví a la final Sub 20 de CFU.  En el Pre-Mundial Sub 17 de Granada tuve muy buenos resultados. Allí me entero que salía seis días después para un torneo en Dallas, Texas, pero la AFC nunca tramitó mi salida, aunque lo sabían hacía tres meses. Lo supe por el preparador físico tico, Alan Brown. Me engañaron, porque les escribí desde Granada, y me dijeron que sí, que se estaba tramitando. Todo fue mentira”.

El caos llegó en un torneo juvenil en Sancti Spíritus, en un choque contra Camagüey que estos últimos necesitaban ganar. Yanelys era la principal cuando sucedió una jugada polémica, donde fue anulado un gol por una infracción de fuera de juego. El partido quedó 1-1, pero la dirección de Camagüey hizo una apelación a la Comisión Nacional de Fútbol, y la AFC la separó de todo tipo de competición ese año.

La rudeza del castigo habla a las claras de la discriminación hacia las mujeres. Ni siquiera en la primera categoría se toman represalias tan largas y escandalosas. La explicación fue que debían dar una respuesta a los padres del equipo de Camagüey.

¿En serio? La árbitro FIFA de mejor proyección internacional de Cuba fue separada de toda competición, por un gol anulado en un clasificatorio juvenil y porque lo padres pedían “la cabeza de alguien”.

No obstante, Yanelys asistió al curso FIFA de ese año y obtuvo las mejores calificaciones. “Volví a ser reconocida como la mejor árbitro del país, pero el 26 de diciembre de 2017, Abilio Pérez, el representante de Reglas y Arbitrajes en Cuba, me dice que el gafete de FIFA no bajó. Ya sabía que algo estaban inventando, y me lograron separar. A mí no me molesta a cuántas más árbitros hagan internacionales, siempre que haya una cubana representando a este país, para mí será perfecto. Pero conmigo fueron injustos”.

Dicen extraoficialmente que este año la volverán a hacer internacional, pero sinceramente no tiene ningún interés en eso. Con la AFC y quienes manejan sus hilos, ya no quiere ningún tipo de roce. Todavía la Asociación le debe todo el dinero que se ganó con su trabajo en los meses pasados, se sabe que puede pasar mucho tiempo sin que atletas, entrenadores o árbitros, vean un centavo de eso. También que el dinero que FIFA otorga al desarrollo del fútbol en la Isla, es repartido para otras disciplinas, “menos favorecidas”.

“Sigo en el arbitraje porque soy la mejor árbitro mujer de Cuba y me preparo para ello. No es mi objetivo solamente competir con mis compañeras, sino conmigo misma. Pero todo lo sucedido, y cómo se manejan las cosas, duele”.