La expansión del nuevo Coronavirus por todo el planeta ha provocado la paralización casi total de muchos eventos. El deporte no está exento de estos contratiempos, y específicamente el fútbol —en tanto fenómeno social que provoca desplazamiento de masas— ha recibido el stop de las autoridades pertinentes en varios países, en muchos casos con afectación para las competiciones en las que se desempeñan algunos de los futbolistas cubanos.
La Liga Premier, donde milita el avileño Onel Hernández, quedó suspendida momentáneamente tras haber dado positivo Mikel Arteta, entrenador del Arsenal. En días recientes, habíamos establecido comunicación con Onel, quien se encuentra recuperándose de una intervención quirúrgica en la rodilla que lo mantendría alejado de las canchas durante las próximas 5 ó 6 semanas.
En Italia, donde la propagación de la epidemia ha tenido un alcance significativo, residen los cubanos Samon Rodríguez y Joel Apezteguía. Al momento del parón, el Tre Fiori de Apezteguía lideraba la tabla de posiciones en el fútbol de San Marino y el atacante habanero figuraba como segundo goleador del certamen.
“Estoy bien, gracias a Dios. Yo estoy en Pésaro y aquí hay pocos casos, donde más casos hay es en el norte. Pero aquí todo está parado: escuelas, trabajos, todo”, comentó el futbolista para Play Off.
También es España, donde militan —entre otros— el arquero Christian Joel (Sporting de Gijón) y Carlos Vázquez (Unionistas de Salamanca), el virus ha presentado una propagación notable, haciendo que toda actividad futbolera quede suspendida. En el caso de Carlos, la epidemia no pudo llegar en peor momento.
En días recientes, su club había anunciado la convocatoria del jugador capitalino a la selección nacional cubana, lo cual habría convertido a Cavafe en el primer futbolista sin vínculos con la institucionalidad deportiva de la Isla en ser llamado al Team Cuba.
“Lo primero es la salud —afirma el jugador—. Yo estoy bien. Los compañeros de mi equipo también. No ha habido nadie infectado de momento”, dijo.
Asimismo, la MLS y USL —ligas que albergan a varios equipos de Estados Unidos y Canadá— han sido detenidas a causa de la pandemia. En estas competiciones milita el grueso de los futbolistas cubanos que lo hacen en el extranjero.
En el caso de Maikel Chang (Real Salt Lake), la situación ha dilatado su esperado debut en la MLS. Mientras, Jorge Luis Corrales (Montreal Impact), no sólo ha visto afectada su presencia en la Major League Soccer. También la Liga de Campeones de Concacaf ha sido aplazada indefinidamente justo cuando su club disputaba los cuartos de final ante Olimpia. En ambas competiciones, el lateral pinareño se había ganado la confianza del entrenador y ex futbolista francés Thierry Henry.
Afortunadamente, tanto Chang como Corrales, afirman encontrarse en perfecto estado de salud.
Ante la situación que vive el mundo por estos días, a los amantes del más universal sólo nos queda esperar por una normalización de los acontecimientos. Cuando las jurisdicciones sanitarias de cada nación den luz verde al habitual desenvolvimiento de sus respectivas sociedades, habrá que esperar entonces por la decisión de las autoridades futboleras.
En dependencia del tiempo que reste a la temporada cuando alcancemos el estatus de normalidad, bien podríamos presenciar maratones de jornadas balompédicas o —por el contrario— torneos suspendidos completamente.
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