Yuli Gurriel llegó “tarde” a MLB, pero no cabe duda de que, como en Cuba, el pelotero es un fenómeno deportivo, mediático y publicitario gracias a su calidad sobre el terreno, sus batazos a la hora buena y hasta por su peinado llamativo, que le valió el apodo de La Piña. Ahora, vuelve a serlo por un muñeco coleccionable que se agotó rápidamente, al menos online, después de que los Astros lo sacaron a la venta.  

Gurriel es uno de esos casos en que las personas suelen decir que “se le ama o se le odia”, por más que no haya trascendido en Cuba y Grandes Ligas por actitudes ofensivas o polémicas como para generar animadversión, más allá del recordado y polémico incidente de 2017, un gesto racista contra el abridor japonés Yu Darvish que le costó sanción.

Los Astros de Houston sacaron una edición de los populares bobblehead (muñeco cabezón), en que aparece el cubano junto a otro talentoso pelotero como George Springer, un objeto de colección muy demandado por los fanáticos del beisbol.

Estos objetos con una historia interesante y centenaria, cobraron un gran auge cuando en 1999, “los Gigantes de San Francisco regalaron 35 mil bobbleheads de Willie Mays y esto marcó el resurgimiento de los cabezones, que se hacen para todos los deportes, como beisbol, basquetbol, football americano, hockey, futbol soccer e incluso golf y automovilismo”, recuerda un artículo de Yahoo Deportes.

La tienda del equipo de los Astros, en Union Station Lobby – entrada al Minute Maid Park, el estadio de los Astros- oferta lo que llaman el Muñeco Cabezón del mes de agosto, con el Yuli y Springer como protagonistas, que ya no se encuentra disponible online.

Se trata del “George Springer y Yuli Gurriel Houston Astros Yuli’s Barber Shop Bobblehead”, que muestra a ambos peloteros en “la peluquería”, en forma de estas piezas de cuerpo delgado y cabeza grande.

Como explica el equipo en su descripción, “representa a Springer y Gurriel luciendo un peinado similar, con Springer sentado en una silla de barbero y Gurriel posando con uniforme y delantal de barbero, orgulloso de su trabajo”.

Yuli Gurriel y George Springer muñeco cabezón Astros
Foto: Astros de Houston

El “cabezón” está hecho a mano y mide unas 10 pulgadas y solo se fabricaron unos 400, cada uno con un precio de 100 dólares. Su aceptación fue inmediata, y ya se agotaron, una muestra del filón comercial y publicitario que estos dos atletas tienen, y en este caso, el Yuli fue un motivo importante de inspiración, pues el peinado de Springer luce como una imitación de la “Piña” de Gurriel.

No es la primera vez que sale a la venta algún bobblehead de Yuli, pues se conocen otros de él, con referencias a la Serie Mundial de 2017, en que aparece con el trofeo y en otro se le ve bateando.

Lo cierto es que, en su larga historia beisbolera, Cuba ha tenido pocos peloteros tan mediáticos como él, muy querido, pero uno de los más cuestionados de cuantos han pasado por los diamantes cubanos, y que ahora, brilla en MLB.

Aunque llegó al mundo del béisbol marcado por la estrella de su padre, Lourdes Gurriel, una de las leyendas de la pelota cubana, puede decir que tiene una carrera sólida, por sí mismo, capaz de emular a la de su progenitor, que nunca pudo jugar en Grandes Ligas.

Además, como demuestra el éxito de su muñeco cabezón, todavía a los 36 años y a las puertas de la agencia libre, Yuli Gurriel sigue siendo un fenómeno total.

Mantente actualizado con Telegram

¿Quieres estar siempre al tanto de la actualidad del deporte cubano? Únete a nuestro canal de Telegram: ¡lleva a Play Off en tu bolsillo! Haz click para seguirnos en: t.me/playoffmagazine